Despertar nº 1:
Serían aproximadamente las siete y media de la mañana (minuto más, minuto menos, tampoco está una como para muchas precisiones a esas horas), del sábado 30 de marzo pasado cuando hasta mi dormida mente llegan unos lejanos y terribles gritos:
- ¡Hijo de p….! ¡Te mato, te juro que te mato!
¡BLAM! (esto no es un grito, esto se supone que es la onomatopeya de un tremendo portazo, sigo).
- ¡Te voy a matar, hijo de p…! (el repertorio es poco variado, lo sé, pero yo no soy la autora así que no se me puede culpar de ello).
Después siguen unos cuantos ¡BLAM!, y algún ¡BUM! ¡PAM! Y sonidos por el estilo.
Durante un rato, silencio. Y luego, vuelta a empezar. Sólo se escucha una voz, siempre la misma, quizás algún día averigüe si el destinatario de esos alaridos es imaginario (y por eso no contesta) o si, sencillamente, opta por el silencio para evitar ser víctima de este energúmeno.
Debo tener el sueño muy ligero porque soy la única que se entera de esta, ya habitual, escandalera: ni la niña ni el husband reaccionan.
En fin, después de un ratito de ¡Hijo de p…! y de ¡Te voy a matar cab…! Más algunos portazos más, el silencio vuelve a reinar.
… Hasta que el vecino de al lado decide darse una ducha mañanera. Ducha o baño. Ducha (o baño) y resto de abluciones mañaneras. El aseo queda justo al otro lado de la pared y, a esas horas, un simple grifo suena como una catarata.
Entre los gritos anteriores, el aseo matinal de mi vecino y el sol que ya entra por la ventana (nunca bajo las persianas totalmente, no soporto la oscuridad total), recuperar el sueño es casi una proeza imposible.
Pero, finalmente, logro volver a dormir (caray, es sábado, no pueden exigirme que me levante temprano un sábado…).
Despertar nº2 (y definitivo, por supuesto):
Diez y cinco minutos. Una niña de cinco años, galletas en mano, llega hasta la cama de sus padres y pide a su mamá (o sea, yo) que le haga un sitio para dormir un rato…
¡JA!
Me muevo un poco hacia la derecha, empujando (a base de culadas) al padre de la criatura un poco más hacia el borde de la cama.
La enana acomoda su cuello sobre mi brazo izquierdo y sigue royendo las galletas (menos mal que está sobre las mantas).
Entre que roe y roe, me da besitos en la mano, en el brazo y en la cara.
Y entre roer y roer, y entre besito y besito, la enana va murmurando en plan letanía:
- Quiero mucho a mi mamá (roer, roer…). Mi mamá es la mamá más buena del mundo (roer, roer…). Mi mamá es la mamá más guapa de todas las mamás (roer, roer, besito...). Quiero a mi mami mucho, mucho, mucho (roer, besito, roer…).
Así continúa un rato comiendo galletas, dándome besos y soltando su retahíla:
- Mi mami es la mejor mami del mundo (besito, roer, besito...). Te quiero mucho, mamá. Mi mamá es taaan suave... Mmmm... Mami, hueles muy rico... Te quiero mucho... (roer, roer, besito...).
Finalmente acepto captar la indirecta y levantarme de la cama. A fin de cuentas ¿quién puede resistirse ante semejante “despertador”?
Eso sí, sin la menor duda, es mucho mejor este despertar que el primero.
Menos mal que no tienes mal despertar. :P
ResponderEliminarPD: Me debes un emilio (roer roer mi pizza :PPPP)
¿Has visto mi nuevo look bloguero? jijiji
Jo, qué suerte.
ResponderEliminarMi hijo se va al salón y se pone los dibus (manga japonés de ese de golpes y ataques de fuerza)que ya empiezan a oirse de fondo mientras me resisto a despertar del todo y es el gato el que se viene a la cama avisando de que amaneció hace rato.
Me pisotea (pesa siete kilos) y se acomoda sobre la manta junto a mi cara, mete la suya en mi cuello y empieza el ronroneo y las cosquillas con las cejas y los bigotes.
Así ya no hay quien duerma.
¡qué segundo despertar más precioso, de verdad que quién puede resistirse a tanto roer, roer, besitos, caricias y ternuras!, tienes una niña preciosa.
ResponderEliminar¿Sabes?, me has recordado a unos vecinos que tuve en mi anterior domicilio, puede que alguna vez escriba algo sobre ellos, sería hasta gracioso.
Besicos
Yo quiero un despertar como el segundo!!!
ResponderEliminarQuiero mimos!
un beso!!
yo prefiero la oscuridad total para dormir, y como tú, una voz familiar y suabe para despertar :)
ResponderEliminarYo mientras estaba de estudiante tube unos vecinos que las peleas las hacian al acostarse ( a eso de las 4 de la mañana) basicamente la rutina era: pelea, sonido de colchon (ejem..pero reconciliacion solo a medias), pelea, puerta del cuarto, puerta de la cocina, puerta de la nevera,(20 minus despues) sonido de colchon.Hay gente que pilla unas rutinas muy raras y molestas
Yo suelo despertar los sabados con un recordatorio de las promesas que hice en la semana: andar en bici, ir al zoo, a la plaza, etc. y hay que cumplir sino el reproche será peor. Besos
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo... la segunda manera de despertarte es la mejor, porque con la primera... por los dioses!!!! benditos vecinos de tormentas mañaneras....
ResponderEliminarPues el segundo desperta es muy bonito, eh! Asi que no se te ocurra quejarte!!! :P
ResponderEliminarBesos!
Álex: Lo del mal o buen despertar depende mucho de cómo me despierten (Y a qué horas). Sé que te debo emilio, lo tengo apuntado en mi agenda :P
ResponderEliminarTesa: Bueno, este sábado fue un poco excepcional. Lo normal es que, desde las ocho y media o así la enana empiece a gritarme: Mamiiiiiii, el desayunoooooo, mamiiiiiiiii tengo hambreeeeee.... y así en intervalos de diez o quince minutos. Casi prefiero al gato :D
Nani: Ahora me has dejado intrigada con tus vecinos y esperando que cuentes sus aventuras :)
Musi: Pues na, búscate quien te haga mimos mañaneros, alguien se presentará voluntario, seguro :D
Beatriz: Mira, al menos tus vecinos acababan con reconciliaciones (ruidosas, eso sí, pero reconciliciaciones) mientras que éstos... igual acaban en comisaría cualquier día de estos.
Hernán: Huys, esas peligrosas hechas en momentos de debilidad :D Peligroso hacerlas y mas peligroso no cumplirlas (por cierto, no me ofendo en absoluto porque prefieras el relato original que mi versión :)
Gitana: Bueno, las peleas ahora son mañaneras, hasta hace unos meses eran nocturnas. Se ve que van rotando turnos :D
ermoya: Vaaale, vale, no me quejo. ¡Qué gente! :P
Tanto "mi mami es buena, mi mami es la mejor del mundo, mi mami es suvecita, mi mami esto y mi mami lo otro" me parece sospechoso, cuando menos...
ResponderEliminarjejeje, a mi tampoco me gusta la oscuridad total. Suelo dormir con la persiana levantada.
ResponderEliminarPedazo despertador, hija ... no te quejarás, eh? Si hasta te trae el desayuno a la cama!!! jajajaja (Vale, las galletas eran para ella, pero seguro que si le pides alguna te la da). Oye ... estás segura de que no quería nada? jejejejeje
Besotes.
Mis vecinos discuten más al acostarse. Por lo menos no nos hacen madrugar. Lo de tu niña, no tiene precio. Un beso.
ResponderEliminarufffff, esperemos que quién sea no cumpla la promesa.
ResponderEliminarNi punto de comparación entre el primer despertar y el segundo :P
Aysss... y yo que pensaba que te iba a decir que le compraras algo... Jaajajajaa!!!
ResponderEliminarPues si, qué despertador más chulo tienes!!
Un besazooo
A mi, que no tengo hijos, el peloteo de tu niña/ratita me parece sospechoso... sospechoso del todo. pero también me parece tierno y lindo, lindídisimo... qué envidia!!
ResponderEliminarbesos
Jooooooooo
ResponderEliminarMe has puesto supermoña!!! Y no son horas!!! Ni momento!!! Que estoy en el trabajo y en lugar de mandar a freír monas a mi jefe le voy a dar un besito (y, como añadido, me han dado ganas de comer galletas xDDDD).
Es un despertar de lo más dulce. Te envidio, hace mucho que nadie me despierta de buenas maneras.
Besos mil.
Ains... A mí me despierta mi madre con un besito todas las mañanas a las siete y media.
ResponderEliminarDesde el lunes ;P
Pero mola ^^
Besotes, Nanny.
Pues sí, nadie puede resistirse a un niño comiendo galletas que te piropea sin cesar... si es que nos tienen cogida la medida...
ResponderEliminarBesos!
Me ha gustado muchisimo toda la entrada. Que chulo como has descrito todo, el mal y el buen despertar. Sin ninguna descripcion me has trasladado a esa mañana.
ResponderEliminarMe ha encantado.
Un besico, muac!
jejeje me gusta bastante ese despertador! hablando muy bien de ti en vez de emitir sonidos que hacen que se te pongan los ojos como platos!!
ResponderEliminarUn beso!
¡Qué tierno despertador!, el de tu hijita claro.
ResponderEliminarJoer, Nanny, has sido capaz de despertar en mí instinto maternal!! O_o Eres una artista!!
ResponderEliminarCómo me gusta que me despierten los domingos los pasos rápidos y contundentes de mi niño corriendo hacia mi cama, para dar un salto y colarse dentro entre los dos. El mejor momento de la semana. Y luego, a desayunar chocolate con churros. ¿Quién puede darme más?
ResponderEliminarBesazos.
JAJAJAJAA...me encantaría conocer a tu hija, una niña de cinco años que mientras roe galletas es capaz de amar a su madre y, lo mejor, expresárselo; seguro que no tiene desperdicio...
ResponderEliminarUn relato lindo, como siempre y, por cierto, lo de las duchas mi vecino de arriba lo hace a las dos de la madrugada todos los días, yo ya me acostumbré, pero mi churry no...jejeje (siempre es mejor que las voces...)
Yo a veces me entero hasta del despertador del movil de la que vive en el piso de arriba, y no exagero, es verdad.
ResponderEliminarYo tampoco puedo con la oscuridad, y tengo la capacidad de poder dormir aun entrando el sol por la ventana :D
Besos!!!
delicioso relato... te mereces ese premio, mujer... y más... Hablando de despertares mi texto de hoy va sobre sueños... anda... besos... pau
ResponderEliminarQue mona la niña la verdad ^^, aunque es lista eh? Te hace chantaje emocional!! jajajaja
ResponderEliminarY tus vecinos pelean o hacen preching catch o como se escriba?
Ooooooooh! qué dulce el segundo despertar!!
ResponderEliminarQué niña tan cariñosa, jejeje.
Yo los sábados me despierto invariablemente (a no ser que el cansancio sea increíble) a las 10 de la mañana (diez minutos arriba, diez abajo) con la vecina de arriba pasando el aspirador, qué puntualidad la tía.
Me gusta tu despertador ( a quién no?), dale mucha, mucha cuerda para que tus despertares sean (en la medida de lo posible) siempre con gallegas aún a pesar de las miguitas en las sábanas.
ResponderEliminarBesos desde Galicia
Marnie
Me encantan esos despertares (los segundos por supuesto o_-)
ResponderEliminarBesotessssssssss