
“Vendo cerebro. Veinticinco años. Casi casi a estrenar. Sólo ha sido usado para cosas superficiales. Nunca se le ha permitido estudiar, ni dedicarse a nada demasiado profundo, ni mostrar curiosidad o pensamiento crítico alguno. Nunca ha leído. Nunca ha sido utilizado para reflexionar sobre política, filosofía, ciencia, literatura o cualquier otro tema (no era necesario, siempre encontraba a alguien que lo hiciera por él). Con un poco de limpieza y mantenimiento hará un gran servicio a quien lo compre. Era una pena mantenerlo -y desperdiciarlo- en semejante cabeza, por eso decidí extirparlo y venderlo a alguien que lo merezca mucho más.
Interesados ponerse en contacto con: brainextractor@psycho.com”

En un principio pensé que sería alguna broma de mal gusto o, tal vez, algún tipo de publicidad de esa que se lleva tanto ahora. Viral creo que la llaman.
Estuve tentada de alertar a la policía pero luego me di cuenta que pensarían que soy una vieja chocha y no me harían ni caso.
Al cabo de un rato me pudo la curiosidad y le pedí prestado el ordenador a mi nieto.
Ahora, a mis más de sesenta años, disfruto de un maravilloso y casi intacto cerebro nuevo y me he hecho socia del anunciante. Nunca hubiera imaginado que el negocio de compra-venta de cerebros resultara tan lucrativo ni que existiera tanta gente que no usara el suyo.
Recuerde: si desea un cambio de cerebro, si no usa el suyo demasiado o si conoce a alguien en cualquier de ambas circunstancias, no dude en ponerse en contacto con nosotros en la dirección de e-mail que aparece más arriba. Nos pondremos en contacto con usted inmediatamente.
Le aseguro que quedará la mar de satisfecho con nuestros servicios...