
Estaba allá afuera, mirándome, como si me estuviera esperando y, en cuanto vio un resquicio, se metió en casa, sin pedir permiso ni nada la muy mal educada.
Una vez dentro se dio un buen paseo por todas las habitaciones, una por una, como echando un vistazo rápido a su nuevo hogar.
Luego dio dos o tres vueltas en torno a mi marido que la despidió con un par de manotazos lanzados al aire lo cual, obviamente, no sentó nada bien a la mosca que se alejó de allí bastante ofendida.
A continuación se puso a girar alrededor de la cabeza de mi hija que, al igual que su padre, la despidió a base de manotazos y gritos. La pobre mosca, medio aturdida y bastante apenada vino a donde yo estaba y parece que le caí bien porque decidió adoptarme. De modo que durante todo el día la mosquita me ha estado siguiendo fuera donde fuera.

Si iba a la cocina, allá iba ella, volando a mi alrededor. Posándose en la lavadora o en el microondas y limpiando sus patitas mientras yo andaba ocupada preparando la comida o fregando. Si me sentaba a leer mi amiga, la mosca, se paseaba por las páginas del libro como si la muy boba pudiera leer lo que allí había escrito. Si me ponía a ver la tele, allá iba ella conmigo, se posaba en mi rodilla y hasta parecía interesada en las noticias y todo.
En fin, el caso es que me acostumbré a tenerla rondando a mi alrededor. La verdad es que, aunque parezca mentira, ese modesto insecto me hacía mucha compañía. En muy poco tiempo -un par de horas- nos volvimos inseparables mi mosca y yo. Era tan graciosa cuando se frotaba las patitas delanteras... Ya hasta había comenzado a enseñarle a comer de mi mano. Es más, estaba pensando en construirle una pequeña casita porque estaba a punto de tener descendencia.

Por eso me enfadé tanto con mi marido cuando la aplastó con el periódico. ¡Zas! De un golpe, acabó con mi pequeña amiga. Delante de mis narices. Fue muy cruel. Me queda el consuelo de que la pobrecita no sufrió porque, con semejante golpe, la muerte fue instantánea.
Mi marido dice que estoy loca porque le he obligado a preparar un sepelio de lo más solemne. La he metido en la caja de cerillas más bonita que he encontrado, hemos ido al rincón más bonito del parque y le he obligado a decir unas palabras. Después él se ha ido rezongando y diciendo no sé qué de loca maniática mientras yo me he quedado un ratito llorando a mi pequeña amiga.

Ya sé que es difícil de entender tanto cariño en tan poco tiempo a un ser tan insignificante pero es que me hacía tanta compañía... bueno, al menos me quedan sus huevos, debe haber más de cien. Yo cuidaré de sus hijitos, de todos, y de los hijos de sus hijos también.
Ah, sí, estoy segura de que ellos también me harán mucha, mucha compañía.
Los seres más insospechados...pueden ser una buena compañía...hasta una mosca....He leido tu relato queriendo "querer" a tu mosca y....¡esta vez no lo he conseguido! ¡Me aburren las moscas, me exaasperan....! Pero ¿quien dijo a quien queremos y a quien no?...Besos
ResponderEliminarWinnieO: Normal que no hayas podido querer a la mosca... ¿quién puede querer a una mosca sino una perturbadilla como la del relato? ¡Con lo pesadas que son! Bueno, la verdad es que yo no puedo con los insectos... con ninguno :D
ResponderEliminar.....Y de pronto, al final, me encuentro con el final también de la película Psicosis y a Anthony Perkins, acariciando a una mosca en el dorso de su mano que decía: pero si mi hijo no es capaz de hacerle daño ni a una mosca....
ResponderEliminarLo decía su madre.
Él era su madre.
Padecía doble personalidad.
Creo que más o menos era así.
La memoria se equivoca a veces.
Me ha encantado Nanny de verdad.
Y eso que me daba un asquillo de los huevos....
De los huevos de la mosca me refiero. No vayamos.....
Juas ...estamos piradas Nanny.
ResponderEliminarYo escribí un relato, hace tiempo, de una zumbada que las alimentaba después de que se hubiesen reproducido a costa del cadáver de su novio, durante días y días, en el sofá del salón a modo de madre de Norman Bates en Psicósis.
:)
(Mola tu texto)
puagggg si las moscas no me gustan ...sus huevos menos!!!!........jajajjaja pero ya veo que te distraes hasta con una mosca!!!.
ResponderEliminarBesazos guapa!!!!!
Jajaja, ¡que buena compañia!
ResponderEliminarLa mosca "cojonera" com la solemos llamar en mi tierra. Ahora son una delicia, porque están un poco aletargadas y si te descuidas, hasta se quedan a nadar en el vaso de agua, en el café o en cualquier sitio, que es de uso privado. Un poco mal educadas ellas y encima nos endiñan a sus crias, ¡Pos no tienen cara las jodias!
¡Ay que ver como eres capaz de sacarle punta hasta a una mosca, jejje!!
Besicos guapa
Eso es inspirarse en el vuelo de una mosca y lo demás son tonterias. Mi mas sentido pésame por la pérdida de tan inestimable mascota Nanny.
ResponderEliminarBesitos
Tecla: A mí me dan asquillo los huevos, las moscas y cualquier insecto -viviente o no-. Y esa imagen de Norman Bates acariciando una mosca con cara de ido me ha dado escalofríos... brrrr... :D
ResponderEliminarTesa: Piradas es poco... Eso sí, que conste que yo siempre he avisado de que la cabeza me funciona de maneras extrañas ¿eh? :D En cuanto has comenzado a hablar de tu relato lo he recordado, era muy... brrrr... :D Lo curioso de este mío es que comenzó como algo humorístico y mira como ha acabado; cuando yo digo que las historias tienen vida propia...
Ambrosía: Jajajajaja... pues sí, ya ves todo lo que ha dado de sí una mosca despistada que andaba por casa :D
Nani: Por aquí las moscas ya andan de capa caída; apenas se ve alguna despistada y solitaria, cosa del frío y menos mal porque no hay quien las aguante por mal educadas, pesadas y "cojoneras" :D
Barbie-funcionaria: Muchas gracias por tu pésame. Si te apetece tener una mosca de mascota puedo ofrecerte una de las mosquitas recién salidas del huevo :D
Conclusión: ¡ PONGA UNA MOSCA EN SU VIDA !
ResponderEliminarPero como esa, cariñosa, tierna y amable, que para moscas coj... s ya hay bastantes por ahi.
Genial el relato.
Tiene gracia porque cuando mis hijos me dicen que quieren una mascota, yo les contesto que si no les vale con una "moscota" que hay muchas. Un beso.
ResponderEliminarHay cariños que surgen así, de lo efímero...
ResponderEliminarYo, por mi parte, no puedo hacer otra cosa más que quitarme el multicitado sombrero...
En México, por allá de principios de los 90’s un grupo tenia una canción llamada el Mosquito Bilingüe, trataba de un mosquito que podía leer y para evitar ser aplastado por un niño que tenía examen el mosquito leía y estudiaba por el , hasta que un día el hermano mayor lo aplastó ….tu historia me lo ha recordado, y me ha hecho esbozar una sonrisa…no obstante te acompaño en tu dolor.
ResponderEliminarVaya con la mosquita (muerta). Pero, claro, no están establecidos cuáles animales pueden ser mascotas y cuáles no. De hecho, conozco a algún loco con bichos raros que ... En tdo caso, me he reído con el relato. Eso sí, a tu protagonista habría que recomendarle algún psiquiatra. Un beso.
ResponderEliminarErnesto: :D Cierto, moscas coj... hay de sobras, incluso con aspecto humano. La pobre mosca de mi relato, en el fondo, era una santa :D
ResponderEliminarSusana: Bueno, casi mejor que no te hayan hecho caso, que si llegan a adoptar una "moscota" imagina cómo tendrías ahora la casa ;D
Necio-Hutopo: Y hay cariños que acaban así: con un brusco golpe (esto me quedó hasta profundo ¿eh? :D).
Tnf25: Me ha encantado esa historia del "Mosquito Bilingüe" :) Gracias por esa sonrisa que has esbozado, es lo que pretendía :)
Miro: Exactamente, no están establecidos qué animales pueden ser mascotas y cuáles no. ¿Por qué vamos a limitarnos a perros, gatos, canarios o hamsters (entre otros) habiando tanta variedad animal? :D Menos mal que comienza a aparecer gente que se ríe con mi relato, empezaba a creer que el final me había quedado demasiado horripilante.
Eso sí que es hacer amigos en todas partes...
ResponderEliminarQuizá, en este momento, sea más semejante a tu marido... Pero entiendo tu dolor, así que mi más sentido pésame :)
Un besitooo
Ahy!!... Nanny, tu siempre me sorprendes. Con tus escritos. Sabes mientras leía este post, imaginaba la pobre mosca aplastada, qué cruel. Si hasta me dió penita.
ResponderEliminarEs una historia, en la vida real. No me agradan ni por muy amigables que se presenten. Su estructura física, no es muy hermosa, sumado a eso. Se posan en todos lados... Ufs!!... Nooo!
Cariños, eternos!
Lo bueno de una mosca por mascota es su economico mantenimiento y que no tienes que sacarlas de pase. Ahora con la nueva generacion no quiero imaginar yo "el mosqueo" que va pillar el marido jajajajaj
ResponderEliminarHola guapa! Nada, simplemente decir que me ire poniendo al día con vuestros post poco a poco, ando un tanto liada y, previsiblemente, seguiré liadilla unos cuantos días más.
ResponderEliminarEn cto a la mosca.... Pobrecita, menudo marido más insensible.
Una preguntita... Con lo pequeña que es una mosca, si la aplastó con el periódico de un solo golpe... ¿cómo se salvaron los huevos? ;)
Saludines, Nanny