Ella le dijo que no quería volver a verle y él, mientras se perdía entre la lluvia, dejó que el agua fuera difuminando su figura y borrando su recuerdo.
Era una sombra en una ciudad fantasma huyendo de una vida irreal y de un amor soñado.
Era un fantasma en una ciudad irreal huyendo de una vida soñada y de un amor en la sombra.
Era un sueño en una ciudad en sombra huyendo de una vida fantasma y de un amor irreal.
Era un fantasma, un sueño, una irrealidad, una sombra, nada...
Es normal sentirse pequeño cuando se es tan pequeño como él. Es normal sentir que el mundo es inmenso, misterioso y extraño cuando se es tan joven como él. Es normal asomarse a la ventana y soñar con lo que hay más allá cuando se es tan soñador como él. Es excitante y hermoso tener todo un universo de cosas por descubrir cuando apenas comienzas a dar tus primeros pasos en el misterio, como él.
Llevaba bastante bien lo de las transformaciones mensuales, soportaba con paciencia las ropas hechas jirones y el sabor a sangre coagulada del día después. Sufría con paciencia los dolores musculares provocados por los excesos físicos que esas noches hacía. Para él lo único realmente malo de ser hombre lobo era la tremenda alergia al pelo animal que padecía desde pequeño.
Me encanta cada uno de los textos que hay al lado de las imágenes :D
ResponderEliminarClaudiettha J.V.: Muchas gracias,Claudiettha :D
ResponderEliminarImágenes plagadas de perspectiva y sentimientos…
ResponderEliminarBesitos nuevos.
Kimbertrancanut: Tiempo sin verte por aquí (y tiempo que no comento en tu blog). Espero que disfrutaras con tu visita :)
ResponderEliminarexcelentes microrelatos ... tienes mucho talento
ResponderEliminarAbril: Muchísimas gracias, Abril, tú también tienes mucho talento ;)
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