Indefinición
Busco un no sé qué que yo que sé. Quiero un yo que sé que no sé yo. Deseo un vete a saber qué que a saber qué es. Anhelo un algo que desconoces, una cosa que no he visto, un que sé yo que yo no sé. Ansío un je ne sais quoi, un I don`t know what, un no tengo ni idea, un vete tú a saber qué que no sé qué será...
Fósil
Quiero ser un fósil, escribió lentamente en su diario con su cuidada letra, quiero dormir fundida en la roca un largo y pacífico sueño lejos del dolor y la pena.
Quiero ser un fósil -siguió escribiendo sin alzar la mano del papel- y dormir envuelta en piedra y acunada por el tiempo hasta que unas manos futuras me encuentren, me saquen de nuevo a la luz, me traten con mimo y cariño.
Quiero ser un fósil -seguía trazando letras mientras el papel se manchaba del rojo de su sangre- y que, tras extraer mi cuerpo de mi tumba pétrea, esas manos futuras me inventen una nueva historia donde, quizás, haya algún momento de felicidad, esos mismos momentos que nunca he disfrutado.
Quiero ser un fósil...
Apatía
Ni la tele, ni la radio, ni los libros, ni internet, hay días que te hundes lentamente en la apatía... sin saber bien por qué.
Ni escribir, ni caminar, ni hacer deporte, ni estudiar, hay días que sólo tienes ganas de holgazanear.
Son días que pasan con lentitud agosteña, con sosiego veraniego, con pereza canicular aunque sea pleno invierno o haga tiempo otoñal.
Ni jugar, ni trabajar, ni hablar, ni pasear, hay días que te conformas con tirarte en el sofá.
Hasta vivir, esos días,te da una pereza mortal...
Cordones
Ya estás otra vez con los cordones desatados, como siempre. ¿Cómo es posible que ni difunto puedas mantener los cordones atados? Anda, deja que te los ate, al menos ahora no podrás protestar ni decirme que los deje así, como siempre hacías.
Hale, ya está ¿Ves? Ahora no se desatarán esos malditos cordones. Siempre te dije que esa manía de no atártelos nos iba a dar un disgusto. Y tú te reías de mis cosas. Un día te romperás la crisma, te decía. Un día te caerás, te decía. Y tú, ni caso.
Y al final, ya ves, yo tenía razón... aunque lo que nunca pude imaginar es que fueras a utilizar esos endemoniados cordones para colgarte de ellos.
Ya tenían que ser unos cordones fuertes para poder colgarse con ellos... yo creo que antes se romperían con el peso de la persona, ¿no? Mejor usar una sábana, las cuerdas de tender la ropa, un cinturón... o una cuerda especial para la ocasión, si total, ya después no va a tener más gastos...
ResponderEliminarA mí me pasa con cierta frecuencia, sobre todo en verano, lo de la apatía. Es que se pasa el día entero sin hacer absolutamente nada. La verdad es que, de vez en cuando, es hasta necesario. Pero sin pasarse, que luego uno se acostumbra y luego es difícil salir de ahí.
El primero me ha parecido tan bonito como triste...
Un beso!
Me gusta el primero, resulta divertido.
ResponderEliminarDijo Ortega y Gasset.- "Que no sabemos lo que nos pasa, eso es lo que nos pasa"
...pues eso.
:)
Muy buenos. Me ha encantado y sobrecogido el de los cordones. Un beso
ResponderEliminarQué imaginación. Querer ser un fósil no se me hubiera ocurrido nunca.;) Un beso.
ResponderEliminarPues será que ando de ánimo para esas cosas, pero el que más me ha gustado fue el último...
ResponderEliminarLalaith: Bueno, en principio yo también pensé que eso no era posible pero me dio por buscar en Google y vi muchas noticias sobre gente que se había ahorcado con cordones así que, al parecer, sí que se puede: deben ser más resistentes de lo que parece....
ResponderEliminarLa verdad es que el verano es la época ideal para ponerse uno apático: el calor ayuda muchísimo a ello. Y tienes razón, de vez en cuando, pasar un día así tampoco viene mal :)
Tesa: A mí también me gusta mucho el primero será porque me divertí mucho escribiéndolo :D Además ¿cuántas veces hemos tenido esa sensación de quiero algo pero no sé lo que quiero? Yo, bastantes :D
WinnieO: Ese es también el favorito de mi marido... claro que, en su caso, es porque está inspirado en él (el desenlace no, por supuesto :D).
Susana: Pues será porque me apasiona el mundo de la paleoantropología pero yo a veces me pregunto qué diría de mi un futuro científico si encontrara mi fósil... rara que es una.... :D
Necio-Hutopo: Pues espero que te mejore el ánimo...
“Quiero ser un fósil -seguía trazando letras mientras el papel se manchaba del rojo de su sangre- y que, tras extraer mi cuerpo de mi tumba pétrea, esas manos futuras me inventen una nueva historia donde, quizás, haya algún momento de felicidad, esos mismos momentos que nunca he disfrutado.”
ResponderEliminarQuerida Nanny, te ha quedado un batiburrillo muy interesante. Extraigo este párrafo porque me ha emocionado. Es precioso, a pesar de la tristeza que hay en cada palabra escrita con sangre y congoja.
Qué bonita la idea de que alguien, algún día, invente una historia sobre nosotros.
Besos y un fuerte abrazo.
Mari Carmen: Cada vez que me hablas de lo bien que escribo casi que me creo que soy escritora, muchas gracias :) A mí también me parece una idea bonita esa de que alguien,en un futuro, intentando averiguar quién eras, te invente una historia... Sería de lo más curioso ver hasta qué punto se acercaría o no a la verdad...
ResponderEliminarHola,es verdad en verano apenas apetece hacer algo,de hacerlo al poder ser por la mañana antes de que empiece hacer calor.Ser un fósil está bien para que nos estudien.El tercero me ha conmovido mucho,es muy tierno y triste a la vez pero muy cierto para mí.Un fuerte abrazo y sigue escribiendo así de bien.
ResponderEliminar¡Qué bonito, qué bonito, Nanny!
ResponderEliminarTUTTTOOOOO ME ENCANTA¡¡¡ BESOS¡¡¡
ResponderEliminarMarian: Te he visto muy ajetreada por mis últimas entradas. Gracias por visitarme, gracias por estar ahí y gracias por todos y cada uno de tus comentarios :)
ResponderEliminarLaura Frost: Muchas, muchas, muchas gracias MariLaura :D
Carmen: Y a mí me encantas tú Maritrenzas :D
Felicitaciones por el blog, realmente muy bueno!
ResponderEliminarNanny. No quiero que pienses que no te agradezco tu apoyo y tu respeto durante tantos años. Es sólo que estoy un poco quemada. Un beso.
ResponderEliminarSi yo también he tenido días de esos apáticos que te cuestan levantar del sofá
ResponderEliminarCuentas mucho y haces reflexionar. Eso siempre es bueno.
ResponderEliminarHoy tengo yo uno de esos días raros, raros, raros. Ya somos dos.
Sigo leyéndote.
Un post para reflexionar. Estoy pensando sobre los cambios del verano.
ResponderEliminarQué sorpresa!! Estaba en el blog de Atxia y ha llamado mi atención el nombre de este otro. Leyendo aquí y allí sin saber que era tuyo me he topado con el relato de los cordones. Recuerdo perfectamente el cinco que le di en su momento. Me encanta, Nanny. Te felicito de nuevo. Un beso.
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